Pruebas de detección del cáncer

El cáncer afecta a 1 de cada 3 personas en los Estados Unidos. Si bien el cáncer es un trastorno común, constantemente surgen nuevas maneras de prevenirlo y curarlo. Cuanto antes se detecte el cáncer, más fácil será tratarlo.

En las personas con cáncer las células anormales se dividen descontroladamente, destruyendo los tejidos corporales. Las pruebas de detección del cáncer pueden indicarnos si esto podría estar sucediendo. Cuando aparece una posible señal de alarma, seguimos indagando para asegurarnos de que usted esté libre de cáncer.

Existen muchos tipos de cáncer, incluidos el cáncer de mama, el cáncer de próstata, el cáncer de colon, el melanoma (cáncer de piel) y el linfoma (cáncer del sistema linfático). Entre los tipos comunes para los que ofrecemos pruebas de detección se incluyen:

• Cáncer de mama: Tanto las mujeres como los hombres pueden contraer el cáncer de mama, aunque es más común que afecte a la mujer. Se trata del segundo cáncer más comúnmente diagnosticado entre las mujeres de los Estados Unidos, detrás del cáncer de piel. Realizamos mamografías y otras pruebas para detectar el cáncer de mama como parte de la salud del seno.
• Cáncer de cuello uterino: El cáncer de cuello uterino solía ser la principal causa de muertes relacionadas con el cáncer entre las mujeres, pero esta cifra ha disminuido enormemente desde la aparición de las pruebas de Papanicolaou.
• Cáncer de colon: El cáncer colorrectal o de colon fue la segunda causa de muertes por cáncer en 2020, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Sin embargo, esta cifra está disminuyendo —en parte gracias a las pruebas que nos ayudan a detectar y tratar el cáncer de colon en su inicio. Las pruebas de cáncer de colon pueden ayudar a detectar pólipos precancerosos —masas anormales en el colon o recto. Si se detectan en fase temprana, estos pólipos pueden extirparse antes de que se conviertan en cáncer.

Las pruebas de detección de cáncer nos ayudan de forma adecuada con la detección en fase inicial, ya que pueden darnos un aviso temprano de que usted podría padecer una enfermedad. Aun así, es importante precisar que una prueba de detección no es lo mismo que un diagnóstico —si debe hacerse pruebas adicionales, eso no significa que usted tenga cáncer.

Las pruebas de detección también pueden presentar sus propios riesgos. Puesto que su riesgo de contraer determinados tipos de cáncer dependerá de sus antecedentes familiares y personales, su proveedor de atención primaria y usted decidirán juntos para qué tipo de cáncer le conviene hacerse una prueba de detección.